interZona

Un papelito que dice "Llámeme"

Hasta con ese “nombre total” Armando Bermúdez califica como unos de esos tipos anodinos de las películas de los ’70 que en la siesta persistente de la oficina –un banco, en su caso– son sorprendidos por la oportunidad de embarcarse, por fin, en algo “grande”. Y se mete, aunque la avisan que en ese mismo acto la vuelta atrás deja de ser una opción. Así las cosas, nosotros vamos con él resignando lógicas previas, y fundado nuevas, para ver hasta dónde somos capaces de acompañarlo. 

Galería

¿Ya leíste Notas de suicidio?: Marc Caellas y un ensayo sobre los últimos mensajes de artistas suicidas