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El opio y el hachís

Théophile Gautier

Portada El opio y el hachís
ISBN
978-987-1920-99-0
Páginas
72
Encuadernación
Rústica

Hasta el final de la cena yo me sentí perfectamente tranquilo, aunque las pupilas de mi otro comensal comenzaban a centellear extrañamente y a volverse de un azul turquesa totalmente singular. Una vez retirado el cubierto, y todavía en posesión de mi juicio, fui a sentarme al diván, donde me instalé en medio de un estampado marroquí de la manera más cómoda posible para alcanzar el éxtasis. Al cabo de algunos minutos me invadió un embotamiento general. Me pareció que mi cuerpo se disolvía y se volvía transparente. Veía con mucha claridad en mi pecho el hachís que había comido en la forma de una esmeralda de donde se escapaban millones de pequeñas chispas; las pestañas de mis ojos se alargaban indefinidamente, enrollándose como hilos de oro sobre pequeñas roldanas de marfil que giraban solas con una rapidez deslumbrante...

Edición impresa $9900

El autor

Théophile Gautier

Pierre Jules Théophile Gautier fue un famoso poeta, dramaturgo, novelista, periodista, crítico literario y fotógrafo francés, nacido el 30 de agosto de 1811. Pese a haber sido un ardiente defensor del romanticismo, su obra tiene referencias del parnasianismo (del que fue fundador), el simbolismo y el modernismo. 

 Nació en la población de Tarbes, situada en el departamento francés de Altos Pirineos (Hautes-Pyrénées), en el suroeste de Francia, y se mudó a París en su infancia. En principio quiso ser pintor, pero sus inclinaciones literarias lo llevaron a la poesía, y entabló amistad posteriormente con Honore de Balzac y Victor Hugo. En el colegio conoció a Gérard de Nerval, con quien entabló lo que luego sería una larga amistad. Su poesía empezó a desarrollarse a partir de 1826 y comenzó a publicarla en periódicos como La Presse, entre otros. Alrededor de 1830 adoptó las ideas revolucionarias vigentes y vivió de forma bohemia. Llegó a pertenecer al grupo extravagante y excéntrico de artistas de Le Petit Cénacle, al final del periodo, junto con Gérard de Nerval, Alejandro Dumas, Petrus Borel, Alphonse Brot, Joseph Bouchardy y Philothée O’Neddy. También recibió la ayuda de Honoré de Balzac, quien le dio trabajo en La Chronique de Paris. Durante toda su vida Gautier viajó por varios lugares del mundo, entre los que destacan España, Italia, Turquía, Egipto y Argelia. Sus viajes influyeron en sus escritos, como Constantinopla, Viaje a España, Tesoros del Arte de Rusia o Viaje a Rusia. Los libros de viaje de Gautier se consideran de los mejores del siglo XIX por su estilo personal y su difusión de cultura de cada lugar. Cuando visitó España, en 1840, finalizaba la Primera Guerra Carlista y fue elegido para cubrir la contienda como periodista, trabajo que consideró humillante. En su equipaje portaba un aparato fotográfico (daguerrotipo) con el que pretendía captar imágenes de su viaje. Nada se sabe de los resultados obtenidos, pues al parecer sus intentos fueron infructuosos. Absorto en su trabajo tras la Revolución de 1848, escribió más de cien artículos en nueve meses. Su prestigio fue confirmado al ser nombrado director de la Revue de Paris entre 1851 y 1856. Durante este tiempo llegó ser periodista de Le Moniteur Universel y tuvo gran influencia en la revista L’Artiste. En 1865 fue admitido en el prestigioso salón de la princesa Matilde Bonaparte, hija de Jerónimo Bonaparte y sobrina de Napoleón. Pese a que fue rechazado tres veces por la Academia Francesa, en 1867, 1868 y 1869, fue apoyado por el crítico literario más influyente de la época, Charles-Augustin Sainte-Beuve, quien lo consideró el mejor columnista de prensa del momento. Gautier perteneció, junto con el poeta Charles Baudelaire y el Dr. Jacques Joseph Moreau, así como muchos otros literatos e intelectuales de su época, al club dedicado a la experimentación con drogas, principalmente hachís, llamado el Club des Hashischins. En un artículo publicado en Revue des Deux Mondes en 1846, Gautier detalló sus experimentos. Theophile Gautier murió el 23 de octubre de 1872 y fue enterrado en el cementerio de Montmartre, París.

Ganador al mejor libro argentino de creación literaria: "El náufrago sin isla" de Guillermo Piro es la obra ganadora del Premio de la Crítica de la Fundación El Libro 2024