Ayer se concretó la tercera de las diez jornadas de la XXI Feria Provincial del Libro, que lleva por lema “La lectura es la puerta a la cultura”. La propuesta literaria principal se centró en la exposición del escritor Luis Mey, quien presentó ante la comunidad local su último libro “Diario de un librero” (Interzona). Desde las 16 horas, el autor conversó con los presentes, en compañía de Paulo Neo, sobre el proceso de construcción de su novela.
En diálogo con La Opinión Austral, Mey expresó que quiso charlar con los asistentes antes que realizar una presentación formal. “Creo que la literatura es un juego: si perdemos lo lúdico, se muere la literatura, ya lo decía Cortázar”, añadió.
Respecto a su libro, explicó que “se trata de los últimos diez años que trabajé como librero, lapso en el que fui escribiendo historias”.
“Lo fui construyendo en base a anécdotas de librería: por ejemplo, hay una que cuenta que un hombre le pide al librero ‘Las nenas abiertas de América Latina’ y él está convencido que se llama así”.
“Esto pasó -indicó- y así voy construyendo una trama día a día, en la que fui armando un texto en el que se mezcla el hombre que quiere hacer cultura y el negocio y el comercio”.
“Es la vida misma de la literatura”, sostuvo, “es un comercio, pero también es arte y esta cuestión en los personajes de la obra se discute”.
Mey tallerista-lector
Consultado respecto a sus roles como tallerista y lector, Mey contó que suele brindar en Buenos Aires diversos talleres a grupos y de manera individual.
“Toda la semana doy talleres y además tengo uno virtual que es para todo el país, en donde tengo alumnos de Jujuy, Mendoza, San Luis y Neuquén”, detalló.
En cuanto a su consumo literario, el autor sostuvo que si bien se encuentra leyendo “de todo”, entre su lista actual aparece una novelista y cuentista y ensayista de La Plata “que es más trash que Johnny Rotten con 90 años y lo suyo es ilegible”. Mey se refiere a Aurora Venturini y a su novela “Las primas” (2008). “Esto me partió la cabeza”, confesó.
También mencionó al autor de “Middlesex”, Jeffrey Eugenides, novela que definió como “la mejor de los últimos 30 años”.
Finalmente mencionó su libro favorito, “Claus y Lucas”, de la húngara Agota Kristof. “Es algo que no conoce nadie, pero que me encanta. Es una novela de dos hermanos que tienen que sobrevivir en la casa de su abuela durante la segunda guerra mundial, y ella cuenta cómo su abuela es peor que este enfrentamiento armado. Es muy tragi-cómico”.