La obra de Sir Thomas Browne es de una rareza alucinante. Se trate de medicina, esoterismo, teología o ciencias naturales, Browne escribe siempre con el gesto del anticuario. Su erudición barroca, más apasionada que verídica, es capaz de mezclar la alquimia con los peces que comió Jesús al resucitar, la cetrería con los versos ropálicos, los túmulos funerarios con las respuestas del oráculo de Apolo en Delfos.
Del prólogo de María Negroni
Sir Thomas Browne fue médico, ensayista, anticuario y uno de los uno de los modelos más tersos, complejos y cadenciosos de la prosa inglesa del siglo XVII.
Es autor de varios libros, entre ellos: Religio Medici, Pseudodoxia epidémica (Sobre errores vulgares), Hydriotaphia, Urn Burial o Discurso sobre las urnas sepulcrales que se encontraron en el condado de Norfolk (El entierro en urnas) y El jardín de Ciro.